CATALISIS 1
(2012) 42-47.
Degradación
catalítica de polietileno de baja densidad
mediante óxidos de
metales de transición
Catalytic
degradation of low density polyethylene by transition metal oxides
Fernando A. Aguirre1,2,*, Alvaro Calafat1, Nora Sánchez1,
Manuel Pérez2, Marlin Villarroel2, Tomás García1,
Eliasyerson Belandria1, Freddy Imbert2
1 Laboratorio de Catálisis. Decanato de
Investigación, Universidad Nacional Experimental del Táchira (UNET),
Sector
Paramillo, 5001, San Cristóbal, Venezuela.
E mail: faguirre@unet.edu.ve
2 Laboratorio de Cinética y Catálisis, Facultad de
Ciencias, Universidad de Los Andes (ULA)
Av. Alberto Carnevalli, 5101, Mérida, Venezuela.
E mail: aguirref@ula.ve
RESUMEN
Se estudió la
degradación catalítica de polietileno de baja densidad catalizada por óxidos
metálicos sencillos, en una atmósfera de nitrógeno, variando la temperatura de
reacción (350, 450,
Palabras clave: Polietileno, deshidrogenación, óxidos
metálicos
ABSTRACT
It was studied
the catalytic degradation of low density polyethylene catalyzed by simple metal
oxides in a nitrogen atmosphere, varying the reaction temperature (350, 450, 550
º C) and the amount of catalyst used. Different behaviors are observed
depending on the metal used as catalyst, in the case of nickel and cobalt
promoting the formation of coke, which probably indicates that they are
favoring dehydrogenation reactions. Catalysts based on iron and copper generate
high conversions with low coke formation, probably favoring the formation of
light hydrocarbons that can be used as fuel.
Keywords: Polyethylene, dehydrogenation, metal
oxides
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derechos reservados. Para permiso, envíe un correo electrónico a: revista.catalisis@gmail.com
INTRODUCCIÓN
Los plásticos son quizás
los materiales de mayor desarrollo en el presente siglo. Han contribuido al
avance de la ciencia y la tecnología y están presentes en todas las actividades
cotidianas del ser humano. Tienen diversidad de usos en el área de empaques
para alimentos, envases, construcción, medicina, utensilios, muebles,
electrodomésticos, aplicaciones de alta tecnología, agricultura, etc.
Sin embargo, gran parte de la comunidad
desconoce el impacto ambiental que producen los plásticos,
lo que hace que sean objeto del rechazo de grupos ambientalistas, sobre todo
por el gran volumen que ocupan los desechos, además de las dificultades que presenta su reciclaje por la gran variedad de
tipos de plásticos que están disponibles en el mercado, diversidad de aditivos,
entre los que se incluyen variados colores, encontrándose en algunos casos varios de estos tipos y
aditivos en un solo producto. Se hace imprescindible entonces el manejo
adecuado de los desechos plásticos, bien sea mediante su reutilización,
reciclaje, disposición en rellenos sanitarios o incineración [1].
En general, sólo el 60% de los desechos plásticos pueden ser reutilizados o reciclados, debido a diversas restricciones como las progresivas pérdidas de sus propiedades mecánicas y saturación de mercados para los productos. La incineración es una alternativa bastante práctica, aunque si se lleva sin los controles adecuados, esta técnica solo puede contribuir a la disminución del volumen de los desechos, pero se pueden producir diferentes emisiones que tienen sus propios riesgos para el medio ambiente. Los procesos térmicos pueden ser mejorados con la adición de catalizadores adecuados y de esta manera sacar mayor provecho de estos desechos, bien sea por la obtención de hidrógeno, monómeros, combustibles y coque que puede ser utilizado en la industria del acero por ejemplo. La reducción de material de desecho puede ser bastante drástica si se piensa en el volumen que ocupan, por ejemplo, los recipientes plásticos que se desechan.
En la mayoría de
los procesos catalíticos, se ha hecho común la utilización de zeolitas y
materiales mesoporosos para la degradación catalítica de diferentes polímeros
[2,3], por lo general para la obtención de combustibles. El objetivo de este
proyecto es desarrollar un proceso catalítico de bajo costo para la reducción
de los desechos plásticos utilizando óxidos metálicos como catalizadores para
la degradación de diferentes polímeros y la obtención de diversos productos
tales como hidrógeno, hidrocarburos de bajo peso molecular y coque, que puedan
ser usados en otros procesos, generando un valor agregado para estos
materiales.
PARTE
EXPERIMENTAL
Preparación de los catalizadores. Se prepararon los catalizadores calcinando a
Pruebas catalíticas. Para las pruebas catalíticas se utilizó
un reactor de lecho fijo con flujo ascendente de nitrógeno (30 ml/min), cargado
con
RESULTADOS
Y DISCUSIÓN
Los resultados
obtenidos por DRX demuestran que en todos los casos se forman óxidos simples de
los metales utilizados como catalizadores (Figura 1). En el caso del óxido de
hierro, el patrón de difracción corresponde a la fase Fe2O3,
en el óxido de cobalto a CoO con presencia de una pequeña cantidad de Co3O4
[4]. El níquel y el cobre presentan sus fases más comunes como lo son NiO y CuO
respectivamente. Los análisis por TGA confirman que en todos los casos, los nitratos
son descompuestos a óxidos por debajo de los
Figura
1:
Patrones de difracción de Rayos X del óxido de hierro (izquierda) y del óxido
de cobalto (derecha).
En cuanto a la
actividad catalítica, a
Figura
2:
Análisis por TGA de la descomposición del nitrato de cobalto (A), nitrato de níquel
(B), nitrato de cobre (C) y nitrato de hierro (D).
En el caso del
cobre y del hierro, a pesar de la alta conversión, el material restante solo
presentaba pequeñas manchas grises o negras, por lo que los productos gaseosos que
se forman posiblemente están compuestos en su mayoría de hidrocarburos livianos
a la temperatura de reacción, sin embargo no se encontró sustancias condensadas
en ninguna de las reacciones.
En
Sin embargo, al utilizar níquel y cobalto, el efecto que se produce al aumentar la cantidad de catalizador en la reacción, es la disminución de la conversión. Es muy probable que, debido a la alta actividad que posee tanto el níquel como el cobalto, la formación de productos de deshidrogenación sea muy alta, lo cual se refleja en una aparente disminución de la conversión, si recordamos que se está midiendo es la cantidad de polietileno que se transforma en productos volátiles. Estos polímeros están compuestos por un 10 a 12% de
Figura
3:
Conversión de polietileno a productos gaseosos para diferentes temperaturas
sobre los óxidos metálicos.
Figura 4: Conversión de polietileno a productos
gaseosos a diferentes cantidades de catalizador.
hidrógeno, por lo que una
deshidrogenación completa daría como resultado una conversión muy baja. Esto
podría sustentarse con la gran cantidad de coque que se deposita en estas
reacciones. Por otra parte, también puede estar ocurriendo una rápida desactivación
del catalizador, producto de la cantidad de coque formado, que podría inactivar
gran parte del catalizador
Estos resultados
abren las puertas a una gran cantidad de aplicaciones, ya que se podría
considerar esta reacción como “ajustable” según los productos deseados en cada
reacción. Como se mencionó anteriormente, en muchos casos esta reacción ha sido
propuesta como una alternativa para obtener hidrocarburos que puedan servir
como combustibles, pero con la utilización del níquel y el cobalto, también es
posible la obtención de una parte del hidrógeno que posee el polímero, junto
con una cantidad de coque con carga metálica que pueda ser utilizado
posteriormente en otras aplicaciones, como la catálisis de otras reacciones o
la incorporación del coque a otros materiales.
CONCLUSIONES
La degradación
catalítica de polietileno de baja densidad puede ser catalizada por óxidos
metálicos sencillos, lo cual genera una gran posibilidad de desarrollo de sistemas
catalíticos de bajo costo y que tengan altas de probabilidades de éxito en la
mayor parte de los polímeros comerciales. En los catalizadores estudiados, el
proceso se pudo llevar a cabo a partir de los
REFERENCIAS